lunes, 4 de diciembre de 2017

Siglos de nostalgia



-¿Sabes que es lo más difícil de ser eterno?

Me dijo aquel hombre sin voltear a mirarme, mientras lo seguía por uno de los pasillos de su casa, desde que habíamos subido al segundo piso donde se encontraba este pasillo, el único ruido que se había escuchado eran nuestros pasos sobre la madera, el oírlo hablar repentinamente me hizo preocuparme ligeramente.

-Lo mas difícil, es que realmente nunca olvidas, no se si soy eterno en realidad, a decir verdad solo he vivido unos cuantos miles de años, pero ese tiempo basto para conocer a una enorme cantidad de personajes, mascotas, equipos, artículos, cientos y miles de cosas, claro que no todas significan lo mismo, eso cualquiera lo entiende apenas haya vivido unos 15 años o quizás un poco más, pero….

Guardo silencio repentinamente frente a una muerta, hasta donde parecía era una puerta común de madera, pero se quedó quieto frente a ella como si la puerta lo hubiese paralizado.

-Lo más triste de todo el asunto.

Dijo mientras giraba la perilla de la puerta y abría lentamente la puerta.

-Es que nunca dejas de amar.

Y en cuanto la puerta termino de abrir, supe a que se refería. El cuarto no tenía muebles o ventanas ni nada similar, solo contenía una cosa, cientos sino es que miles de fotos y dibujos, de personas, animales, familias enteras, lugares y muchas cosas más. Supe enseguida que todo esto eran los recuerdos de los seres que él había amado a lo largo de los siglos.

-Rara vez vengo a este cuarto, trato de convencerme de que olvidarlos sería lo mejor, aún tengo muchos años por vivir, o al menos eso creo, por lo que seguir recordándolos es a veces problemático, cargar con siglos de nostalgia a nadie le sienta bien, pero…

Antes de completar lo que iba a decir, camino a la pared y tomo una fotografía de la pared, no logre verla a detalle desde donde estaba parado incluso antes de que la tomara, pero si podía distinguir que en la foto salía una mujer y que era reciente quizás unos 10 años o un poco más.

-También vivir todo este tiempo, me ha hecho creer algo en particular, que el amor nunca se olvida y como quizás yo viva para siempre, entonces para siempre lo quiero recordar.

Cuando dejo de hablar, yo me gire hacia una pared e hice como que examinaba las fotos, realmente esa no era mi intención pero supuse que sería mejor que le diese un momento, ya que los siglos de nostalgia le habían llegado…
Y había comenzado a llorar.

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